‹ Back

El informe El impacto de la IA en la educación en España, elaborado por Empantallados y GAD3, ofrece una visión detallada sobre el uso y la percepción de la Inteligencia Artificial (IA) entre profesores no universitarios, alumnos de 14 a 17 años, y padres y madres con hijos adolescentes. A través de esta investigación, realizada a finales de 2023, se revelan datos muy llamativos sobre cómo esta tecnología está integrándose en el ámbito educativo.

 

Desde redacta.me hemos extraído las conclusiones más importantes de este estudio:

 

• La Inteligencia Artificial interesa a la sociedad, aún con la incertidumbre sobre su uso

 

El estudio destaca que el 82% de los alumnos, el 73% de los profesores y el 69% de los padres han utilizado al menos una vez alguna herramienta de Inteligencia Artificial. Sin embargo, persiste cierta confusión sobre cómo aprovechar plenamente esta tecnología, ya que la mayoría la emplea en conversaciones exploratorias y solo el 33% la utiliza como fuente de información. 

 

Los profesores la utilizan principalmente para generar nuevas ideas para el aula (64%) y complementar contenidos (50%).

 

• El papel fundamental de las RRSS y la prensa en su difusión

 

Las redes sociales y los medios de comunicación tradicionales han desempeñado un papel muy importante en el hecho de dar a conocer la Inteligencia Artificial.

 

Según el estudio, más del 70% de los participantes reconocen haber escuchado hablar de la IA a través de las redes sociales, mientras que más del 50% ha recibido información al respecto a través de la televisión, la radio o la prensa. Es interesante destacar algo que era de esperar y es que los medios tradicionales han tenido un mayor impacto en las personas de mayor edad, con un 86% de profesores y un 74% de padres, en comparación con solo el 54% de los alumnos.

 

• La IA, una herramienta útil en la educación y en el futuro profesional de los alumnos

 

Los adultos tienen una visión optimista sobre el impacto futuro de la IA en el desarrollo laboral de los menores, con un 61% de padres y madres que creen en su influencia positiva, en comparación con solo el 54% de los profesores. Esta confianza se refleja en su percepción sobre los beneficios potenciales de la IA en la educación, donde la mayoría destaca su utilidad en aspectos como la búsqueda de información y la capacidad del lenguaje generativo para explicar contenidos. Sin embargo, existe una discrepancia entre si recomendar o no el uso de la Inteligencia Artificial para hacer trabajos y deberes, ya que el 53% de las familias y el 67% de los profesores no lo ven favorable.

 

• Desafíos de la IA: la creatividad y el pensamiento crítico

 

Tanto los familiares como los docentes presentan dudas sobre si realmente la Inteligencia Artificial contribuye al desarrollo de competencias clave como la creatividad y el pensamiento crítico.

Este nivel de escepticismo o incertidumbre respecto a la capacidad de la IA para impulsar estas habilidades cognitivas se ve reflejado en los datos, en los que, en una escala de 1 a 10, los padres y madres dan un 5,9 y un 5,6 respectivamente, mientras que los profesores otorgan una puntuación por debajo del aprobado: 4,5 y 4,2.

 

• Retos de la IA: mejorar la fiabilidad y reforzar la seguridad de los datos personales

 

La precisión de las herramientas de IA es uno de los aspectos a mejorar. Son los padres y madres, quizás quién menos trato tienen con las herramientas de Inteligencia Artificial, quienes dan una puntuación más alta en este sentido, con un 6,2. Por su parte, las calificaciones tanto de los profesores (5,2) como de los menores de edad (5,6) son muy similares, reconociendo la posibilidad de que la IA proporcione, en ocasiones, información incorrecta. 

En cuanto a las preocupaciones sobre las políticas de privacidad y el uso de los datos personales por parte de las herramientas de IA, la mayoría de las familias (83%) y profesores (90%) expresan inquietudes al respecto. Sin embargo, solo el 47% de los menores entrevistados comparte estas preocupaciones.

 

En definitiva, el estudio revela la necesidad de una mayor claridad y orientación sobre el uso responsable de la IA en la educación. Tanto familias como profesores tienen un papel fundamental en acompañar a los alumnos en este aprendizaje y en promover un uso ético y efectivo de esta tecnología emergente.